Hacer el amor - YooSu

Título: Hacer el amor
Autor: Marysabel
Pareja(s): YooSu, leve MinSu
Extensión: One-Shot
Género: Romance, drama, AU
Sinopsis: Cuando alguien solo busca sexo y diversión. Es lo que obtiene. Lo malo es encontrarse a alguien tan dominante y controlador para ello. Y lo peor, es darte cuenta que para ti y tu vida, el amor es lo único que importa en todo.
N/A: Experiencias que siempre te dejan que escribir~ ... este shot es todo para Karli♥ mi niña que se desaparece ;; pero bueno~ aquí está ya que me desprecias el MinSu ;U; solo te pido que soportes el que puse aquí, todo es a base de la historia ;;

PD: Escuchar 'A Thousand Years' de Cristiana Perri y 'Dígale' de David Bisbal. Fueron las dos canciones que más afssdfa para escribir me dieron(?)




-Entonces… ¿lo haremos? –Junsu desvió su mirada para pensar un poco más antes de dar su respuesta.

-S-si… eso creo. –Changmin sonrió de oreja a oreja, para luego llevar a Junsu a su hogar.

--
--

~ Hacer el amor ~

--
--

[Junsu]

Doy un largo suspiro, vuelvo a cerrar mis ojos y a prepararme mentalmente. Ya estoy aquí y nada puedo hacer. Quizá aún es tiempo de echarme para atrás, pero no. Debo tranquilizarme y seguir. Yo decidí hacer esto, Changmin no me obligó.

Vuelvo a tomar el pomo de la puerta y aprieto mi agarre. Doy un último suspiro y abro lentamente la puerta. Observo la cama, la mesa de noche y el mueble con la televisión a pocos metros frente a la cama.

Camino lentamente fuera del baño, como temiendo que una fiera me comiera. Con mis pasos lentos, dirigí ahora mi mirada hacia el gran ventanal de aquella habitación de hotel en la cual me encontraba.

¿Adónde se había ido Changmin?

-¿Me buscabas? –Changmin susurró por detrás, mientras colaba sus manos bajo la bata de baño que me protegía en ese momento.

-A-algo así… -me golpeé mentalmente por sonar tan nervioso.

-Tranquilízate. Me harás pensar que está es tu primera vez. –comenzó a besar mi cuello y hombro. -¿Acaso, es así? –se detuvo un momento para mirarme. Negué y siguió con lo suyo.

Bruscamente, me tiró sobre la cama y retiro la bata de mi cuerpo. Siguió besando por todo mi cuerpo y acariciándolo. Ya ni yo sabía del por qué estaba allí. Con Changmin sobre mi cuerpo desnudo, besándolo y tocándolo sin ningún tacto.

Quería sexo.

Por eso estaba allí. Quería saber que era el tener sexo. Una aventura, algo de solo una noche. Algo que pasaría y que se olvidaría al día siguiente. Solo eso quería.

Pero me estaba saliendo muy caro. El trato que Changmin me daba, no me gustaba. Porque él solo quería sexo. Y yo, me di cuenta que no quería eso.

[/Junsu]

--
--

~ Hacer el amor ~

--
--

Días atrás

-Debemos darnos un tiempo. –Yoochun miró directo a los ojos de Junsu, serio. Lo que decía era real.

-Por… ¿por qué? –quería llorar. Quería hacerlo como un niño pequeño quitándole su juguete favorito. Pero ya era muy grande. Debía aguantar todo su dolor frente a él.

-Lo nuestro… ahora… puede que no tenga un futuro. –suspiró hondamente.

-¿Por qué? ¿Ya no me amas? ¿Es porque te irás de viaje? –se sentía frustrado, pero se tranquilizaba a sí mismo, para no verse tan débil frente al mayor.

-Junsu, escúchame. –Yoochun lo tomó de los hombros. La voz de la chica anunciando su vuelo a Estados Unidos se pudo escuchar, pero este la ignoró. –Estaré un tiempo considerable fuera del país. ¿Qué me garantiza que no podrías conocer a alguien más y gustarle?

-Yo te amo… -se fundieron en un fuerte y cariñoso abrazo.

-Aun así…

-Tú también me amas… -Junsu se escuchaba muy seguro de lo que decía.

-Junsu…

-También es posible que encuentres a alguien más… entiendo. –asintió sin ganas. Yoochun alejó un poco el cuerpo del otro para mirarlo nuevamente a los ojos.

-Te amo más que a mi vida. –llevó sus manos al rostro del menor y lo acarició con demasiada delicadeza y amor.

-Quiero que sea así por mucho, mucho tiempo. –Junsu cerró los ojos para poder sentir más aquella caricia. Quería guardarla en su mente hasta cuando Yoochun volviera. –Tú también…

-Pensaré en ti, siempre. No podría enamorarme de nadie más que no seas tú. Ahora lo sé. –le dio un último abrazo y aquella voz se volvió a escuchar. –Debo irme.

-No… -soltó en un suspiro. Su corazón dolía y no sabía muy bien por qué. Se volverían a ver, tenían esa promesa en sus corazones. Pero por alguna razón, Junsu se encontraba preocupado.

Angustiado.

-Cuida mucho de ti, Junsu. Volveré pronto. Te amo.  –tomó sus maletas y comenzó a alejarse.
Junsu observó el cuerpo de Yoochun alejarse. Cada vez era un poco más difícil verlo. Hasta que lo perdió de vista, gracias a toda la gente que pasaba de un lado a otro. Dio otro suspiro y metió sus manos a los bolsillos de su pantalón y comenzó su caminar hacia la salida del aeropuerto.

Junsu caminó por largo rato, que ya ni sabía en donde se encontraba cuando volvió a darse cuenta del mundo. Segundos antes de que alguien chocara con él.

-¿Te encuentras bien? –aquel hombre le extendió la mano para ayudar a levantarlo. –Lamento que esto haya pasado.

-Es-está bien… -un poco desorientado, Junsu se levantó con ayuda del otro chico. –También ha sido mi culpa, venía distraído. –Junsu levantó su rostro y se quedó un poco pasmado al ver el rostro del otro chico.

-¿Puedo invitarte a algo? No me gustaría que pienses que dejo a la gente tirada cuando claramente fue mi culpa. –Junsu seguía un poco aturdido.

-No… está bien. También es mi culpa, descuida. –se alejó un poco del otro chico. –Debo irme, yo… -Junsu giró a ver a su alrededor, y no pudo reconocer nada.

-¿Pasa algo? –aquel chico lo vio con detenimiento, tratando de descubrir por su propia cuenta lo que sucedía.

-Si… bueno… -Junsu se alborotó el cabello en desesperación. -Podrías… ¿podrías ayudarme a salir de aquí? –pidió infantilmente. El otro chico río, impresionando un poco a Junsu.

-No eres de por aquí, ¿cierto? –volvió a reír. Sus ojos se volvían asimétricos cuando lo hacía. Y a Junsu parecía gustarle.  –Bien. Vamos.

Junsu asintió y comenzaron a caminar fuera de aquel parque. Junsu le dijo donde vivía y aquel chico sabía cómo llegar a su casa. Hablaron durante todo el camino. Aquel chico se presentó como Changmin, y no dejo ir a Junsu sin la promesa de volverse a ver en otro momento e incluso, intercambiaron sus números de teléfono.

A Junsu no le gustaba el sentir como si su corazón doliera. Como si algo malo pasara. Pero decidió ignorarlo por ese momento. Quizá era solo el dolor de que Yoochun ya no estaba a su lado. Pero sonrió al recordar que el mayor le prometió que volvería. Ambos estarían juntos de nuevo. Él lo sabía. Y así quería.

--
--

~ Hacer el amor ~

--
--

-Vamos Junsu, sé que quieres tanto esto, como yo. –Changmin llevó la mano de Junsu a su miembro y lo movió varias veces sobre este.

-Chang…min…  -Junsu cerraba por momentos sus ojos. En esos momentos odiaba que su cuerpo tuviera reacciones por los toques y roces del otro chico hacia su cuerpo. –Vas muy… rápido. –el gemido que soltó, no le ayudo mucho para detener al hombre.

-Tenemos hora y media… recuerda. Además –Changmin al fin lo miraba al rostro desde que habían llegado a aquella habitación de hotel. –Solo venimos para tener sexo.

Changmin continuó con lo suyo y Junsu cerró los ojos. No le gustó para nada lo que había escuchado, y menos con la rapidez que llevaba todo Changmin.

--
--

Varios meses atrás

[Junsu]

-Yoochun… -susurré. Yoochun dejó de besarme el cuello y me miró directamente a los ojos, logrando que me sonrojara.

-¿Quieres que me detenga? –negué levemente.

-Es… yo… -él sonrió y me acarició el rostro con una de sus manos. Amaba que hiciera eso, me tranquilizaba mucho. –Estoy nervioso –forcé una sonrisa.

-¿Estás seguro? ¿Seguro que son nervios lo que sientes? –no sé qué hacía para saber siempre lo que pensaba, lo que sentía.

-Tengo miedo. –dije con confianza. Sabía que Yoochun no haría nada para lastimarme, pero siempre existe un miedo oculto en tu interior, y el mío comenzaba a salir.

-Podemos detenernos. No hay problema. –volvió a sonreír. Esa sonrisa que me encantaba. Que me tranquilizaba y enamoraba a la misma vez.

-No. Yo quiero hacerlo… quiero pertenecerte completamente. –bajé mi tono, como si estuviéramos en público y no quería que los demás escucharan. Por más solos que estuviéramos.

-No es necesario hacer esto. Yo te pertenezco, como tú a mí. Porque nos amamos. –me besó, lento y cariñosamente. Con amor. Como esos besos que se ven en las películas de romance. Me dio un beso que no necesitaba prisas, de los que muchas personas desean tener con el amor de su vida.

Yo lo estaba teniendo.

-Quiero entregarte todo, Yoochun… -dije ya sin miedo. Porque confiaba en él, y en su amor. Que nunca me lastimaría, porque me ama.

Porque con él haría el amor. No solo me entregaría y tendríamos sexo. Esta sería mi primera vez, y sé que Yoochun haría que todo fuera mágico. Porque me ama, y siempre quiere lo mejor para mí. Y no me fallaría esta vez. Ni nunca.

Esa noche fue más de lo que pensé. Estar entre los brazos de Yoochun. Piel con piel, sudados y amándonos sin control. Sentir su respiración en varias ocasiones sobre varios lados de mi cuerpo, me estremecía, y me encantaba.

Esa noche sin duda, nunca, nada la superaría. Porque hacer el amor es  lo mejor que puedes hacer con la persona amada. Y me encantó demasiado, que mi primera vez, fuera con Yoochun. La persona que amo.

-¿Recuerdas nuestro primer encuentro? –Yoochun me preguntó. Me encontraba sobre su pecho, boca arriba, con nuestras manos entrelazadas y solo sus sábanas tapando nuestros desnudos cuerpos.

-¡Cómo olvidarlo! Aún siento el golpe de la puerta contra mi cabeza. –ambos reímos.

-Bueno… yo me refería a nuestro, primer-primer encuentro. –levanté un poco mi vista, mirándolo de que se explicara mejor. –Cuando ibas escaleras abajo y yo subiendo… te veías muy tierno así… -sonrío recordando.

-Oh… -me hundí un poco en los recuerdos, sin irme totalmente de aquel lugar -¡Oye! Estaba todo desarreglado y cansado… no puedo creer que lo recuerdes –reímos otra vez.

-Bueno… a mí me pareció muy encantador verte así. –me sonrojé. –Lo de golpearte con la puerta, realmente no fue mi intención –se escuchó preocupado.

-Seis cafés después me lo dijiste… creo que hasta puedo recordar el pequeño discurso que me diste en esos días. –reí esta vez.

-Te amo Junsu. –me tomó un poco desprevenido, pero me encantó escucharlo.

-Yo también te amo Yoochun. –levanté mi vista y nos miramos fijamente, para luego darnos un tierno y corto beso.

--
--

Recuerdo mi primera vez con Yoochun… sin duda no se compara con esto. Lo de ahora sin duda es solo sexo… y no quiero seguir. Yo no debo estar haciendo esto. Yoochun me ama. Y yo también lo amo.

Quiero… debo irme de aquí.

Changmin vuelve a penetrarme fuertemente, muerdo nuevamente la almohada. Quiero que se detenga, siento como las lágrimas comienzan a salir de mis ojos. Changmin da unas penetraciones más fuertes antes de venirse.

Deja caer su cuerpo sobre el mío por unos segundos, para luego salir de mi cuerpo, y de la cama.

-Iré a bañarme. Ya regresó, bebé. –me da un beso en mi espalda desnuda. Ya no quiero sentir nada de él en mí.

Escucho la puerta del baño cerrarse. Y sé que esta es mi única oportunidad. Lentamente, y con el mayor dolor de mi vida, me levantó de la cama. Busco mi ropa y demás cosas y me visto cómo puedo y lo más rápido posible. Salgo lo más cuidadoso posible.

Al llegar a la recepción del hotel, pido que me pidan un taxi para así irme a casa. Quiero terminar con todo este infierno de una vez.

Al llegar a casa, voy a mi habitación. Me acuesto en mi cama y rompo en llanto. Sigo sin creer que haya hecho eso… que le haya fallado a Yoochun. A su amor.

Sin darme cuenta, ya amaneció. Me dormí en algún momento después de llorar tanto. Al llegar al comedor, mis padres y Junho me ven preocupados.

-¿Sucede algo hijo? –pregunta mi madre. Si supiera lo que hice, ¿me seguiría amando?

-Te ves muy mal… -Junho. Mi hermano, ¿le daría asco todo?

-Quizá deberías seguir descansando. –papá… ¿me negarías como tu hijo?

-No pude dormir muy bien en toda la noche… -forcé una sonrisa mientras intentaba sentarme. El dolor era demasiado.

-¿Ha pasado algo demasiado grave? –mi madre colocó una de sus manos sobre mi frente. –Puede que no sea fiebre, pero no estás muy bien del todo.

-Estaré bien, mamá. No se preocupen. –dije a todos.

-Creo que habrá algo que te alegre. –comentó mi papá, Junho rió en complicidad. ¿Qué pasaba?

-Ayer en la tarde, hablé con la madre de Yoochun. Vendrá en dos días, hijo. Podrás volver a tenerlo a tu lado. –mi madre parecía muy emocionada por ello.

-Si, al fin, ¿no? –Junho enarcó una ceja, y yo baje la mirada. Solo Junho sabía de mi relación con Yoochun. Si es que tendría una en un futuro.

-S-si… es genial. –fingí, pero al parecer, se convencieron de ello.

El resto de la mañana pasó tranquilo. Estuve en mi habitación, solo. Hasta que Junho llegó a interrumpir mi poca tranquilidad.

-¿Vas a decirme que sucede? –preguntó cuándo pudo sentarse en la silla de mi escritorio para tareas.

-¿De qué hablas? –seguí viendo mi libro, sin leerlo realmente.

-Junsu, tienes el libro al revés. –miré detenidamente el libro, un poco asustado. Y Junho rió. Me mentía ese malvado.

-¡Junho, deja ya de molestarme! –le exigí con mi tono infantil de siempre. Él simplemente rió.

-No me gusta verte triste. Sabes que cuentas conmigo para lo que sea. –me dio una gran sonrisa y antes de que yo pudiera responderle, se fue de mi habitación.

Di un largo suspiro. Tenía razón. Sé que el amor de mi familia nunca me faltaría. Pero debía afrontar esto primero. Debía decirle todo a Yoochun…

[/Junsu]

--
--

Pocos días atrás

-¿Está todo bien por allá? –Yoochun y Junsu tenían una vídeo llamada desde unos pocos segundos atrás.

-Lo normal, supongo. –Yoochun rió. -¿Tú, te encuentras bien? –Junsu se puso un poco nervioso por la pregunta.

-S-si… ¿tú también lo estás? –sonrió para tranquilizarlo.

-Junsu, ¿sucede algo? Acabo de decirte que sí. –lo vio preocupado. -¿Problemas con tu familia?

-¡No! No es nada de eso… -sonrió más nervioso. –Es… Yoochun, te extraño mucho. –era lo más sincero que había dicho durante toda la charla. Se produjo un silencio, y Junsu se golpeó mentalmente por haberlo dicho. –No te preocupes. Yo estoy bien. –dio su sonrisa más amplia.

-Yo también te extraño mucho, Junsu. –volvió a crearse otro silencio. Junsu comenzaba a llorar. –Junsu, bebé. Llegaré pronto. No es como si fuera a quedarme aquí para siempre. –Yoochun comenzaba a sufrir más por ver a Junsu así.

-Per-perdóname… -y Yoochun creyó que se trataba por su llanto repentino.

-Tranquilo… yo también tengo ganas de llorar… ya nos veremos pronto, ¿de acuerdo? Se un poco más fuerte, yo sé que puedes.

-Si… -asintió sin muchas ganas.

-¿Haciendo llorar a mi hermano incluso a grandes distancias? –tanto Junsu como Yoochun se asombraron al ver que Junho también se encontraba allí.

-Junho… -sonrió algo nervioso. –Ahm… no… eh… ¡Yoohwan! Yoohwan está aquí cerca, creo que quieres hablarle, ¿no? Dejaré que hablen un momento. –hasta entonces Junho se sonrojó un poco.

-Yoochun… -Junsu había calmado su llanto.

-Hablaremos luego, ¿sí? Cuídate muchísimo, Junsu. –le dio una enorme sonrisa antes de que Yoohwan fuera el que apareciera en pantalla, y Junho se adueñara de su portátil.

Al día siguiente, Junsu tendría que decirle a Changmin que ya no haría lo que habían acordado.

--
--

~ Hacer el amor ~

--
--

Tiempo actual

[Junsu]

Le había dicho a mi madre que si Changmin llegaba a buscarme, le dijera que no me encontraba. Había bloqueado su número de teléfono y trataba de no aparecer conectado para él, en la red. Ya no salí tanto de casa. Más que todo, para recuperarme por lo que había pasado.

Sabía que él estaba muy enojado. Pero le había dado lo que tanto quería, entonces ¿qué me reclamaría? Solamente del por qué me fui antes del hotel. Pero se lo diría. Cuando estuviera listo.

Por ahora, debía concentrarme en cómo le diría a Yoochun. Él más que nadie debía saberlo. Dentro de unas horas, su vuelo llegará desde Estados Unidos y junto a su madre y mi familia, iremos a recogerlo a él y a Yoohwan.

Comencé a arreglarme porque haríamos una pequeña fiesta en la casa de Yoochun. Al estar listo, toda mi familia fuimos a la casa de los Park, donde la madre de Yoochun nos recibió muy cariñosamente. Arreglamos todo y marchamos hacia el aeropuerto.

Fueron pocos los minutos que esperamos luego de que el vuelo de Yoochun y Yoohwan aterrizara. Mi corazón comenzaba a latir cada vez más rápido. Mis manos temblaban y sudaban. Pero todo se detuvo cuando divisé su cuerpo entre tanta gente.

Cuando la distancia entre él y todos nosotros no fue tan grande, corrí hacia él y lo abracé fuertemente. Íbamos a caer, pero él logró que no fuera así. Escuché su risita en mi oreja, pero no me importó.

Al tenerlo a mi lado, ya nada me importaba.

Fuimos a su casa y celebramos un poco por su llegada. Las vacaciones se acababan en tan solo unas semanas más, así que disfrutaríamos de todos esos días. Y yo tenía que decirle todo lo que había sucedido en su ausencia.

[/Junsu]

--
--

Muchos días más tarde

Yoochun se encontraba recibiendo su pedido de dos cafés y unos panecillos para llevar, cuando Changmin se le acercó.

-Veo que estás con ese chico. –señaló hacia el área de niños y ambos vieron a Junsu ayudando a un niño a subir a uno de los juegos.

-Sí, ¿algún problema? –Yoochun lo miró detenidamente, su aspecto le parecía un poco familiar.

-Solo vengo a advertirte, que no es lo que él dice. Finge ser un chico inocente e incluso virgen. –rió con cinismo. –Y es todo lo contrario. Te utiliza y te deja tirado como si nada. Lo que deja ver, no es nada comparado al monstruo que es en realidad.

Yoochun enarcó una ceja y soltó una risa con demasiada burla.

-¿Tu nombre es Changmin? –Changmin  se asombró un poco y asintió débilmente. –Tener ese odio porque te dejó en el hotel, luego de que por poco tú casi lo violas, no es justificable. –palmeó su hombro y comenzó a marcharse.

Changmin comenzó a enojarse cada vez más. Lo único que quería ahora, era arruinar la vida de Junsu.

Pocos días antes

-Yoochun, te juró que yo nunca quise que eso fuera así… bueno, al principio sí. Pero, tú y yo no estábamos oficialmente juntos… pero… Yoochun, por favor, perdóname… -Junsu se encontraba hincado frente a Yoochun, quien se colocó a su misma altura para levantarlo, pero este no cedía.

-Junsu, levántate. Ya dije que comprendo. Por favor, no te hagas más esto. –Yoochun siguió luchando para que Junsu se levantara.

-Yoochun, créeme. Yo nunca más haría eso con alguien que no seas tú. Porque yo solo puedo hacer el amor y no tener sexo. Y solo puedo hacerlo contigo, porque es a ti a quien amo. Yoochun… por favor… -Junsu comenzaba a llorar cada vez más fuerte, parecía que el cuarto de Yoochun podría ser inundado.

-Junsu, detente… -cuando vio que por el momento, no podría moverlo de donde se encontraba, lo abrazó fuertemente.

Creía en lo que Junsu le decía, porque él también lo amaba. Y notaba la sinceridad en todo lo que le decía. Sabía que muy en el fondo, Junsu no quería lo que había sucedido. Que se sentiría culpable por mucho tiempo.

-Me… me dejé llevar por tu ausencia… no. Por idiota. Lo que pasó, fue porque soy un grandísimo idiota. Yoochun, no merezco tenerte a mi lado… -pese a lo que dijo, Junsu se aferró más al abrazo que compartía con Yoochun.

-Junsu… te amo. Te amo. Te amo. Te amo. Y te amaré siempre. –susurró en su oído. Junsu trataba de regular su respiración y llanto.

-Yoochun… no te merezco… -moqueó un poco antes de que Yoochun lo separara un poco de él y tomara su rostro con sus manos.

-Junsu… fui yo él que dijo que podría gustarte alguien más… lo que tú quisieras que pasara, es cuestión tuya. Yo… fui yo el que dio visto bueno a que sucediera.

-Pero a mí no me gustó…  -bajó la mirada.

-Junsu. –levantó nuevamente su mirada. –Las cosas pasan por algo, ¿no? –asintió.

-Yoochun… qué… ¿qué habría pasado si yo me hubiera enamorado de Changmin? –sentía miedo, por alguna razón. Pero en su mente se repitió mil veces que no se hubiera enamorado de Changmin. No mientras Yoochun existiera en su vida.

-Hubiera dejado irte… que fueras feliz. –sonrió débilmente y Junsu se tiró sobre él para abrazarlo fuertemente.

-Jamás dejaría de amarte. Nunca, nunca. Y ahora más que nunca me doy cuenta de ello. –Yoochun apretó más su agarre y se quedaron así por un largo momento.

Ahora más que nunca ambos descubrían su verdadero amor hacia el otro.

Actualidad

-Eres un maldito cobarde y traidor. –Changmin tomó a Junsu fuertemente  del brazo y lo lanzó contra la pared de aquel bar, donde Junsu y Yoochun iban a verse.

-¿Q-qué quieres? –Junsu sentía miedo, pero sería fuerte frente al otro.

-Un cobarde como para ir y decirle a un cualquiera lo que sucedió. ¿Haciéndote la víctima, no? ¡¿Te divierte?! –Junsu cerró los ojos al ver que Changmin alzaba su puño en ademan de golpearlo.

-Él no es un cualquiera. Es mi novio. –dijo cuando vio que el otro no haría nada. –No debo ocultarle nada. En cambio tú… ibas a ser nada más algo de una noche. Nada importante. ¿Por qué me vienes con esta actitud ahora? –se asombró de su propio tono.

-¿Novio?... ¿Me quieres decir que estabas con él cuando estuvimos de acuerdo en tener sexo? –rió irónico. –Y luego no quieres verte como una puta. –lo miró de pies a cabeza. –Una maldita puta. –Junsu le golpeó en el rostro, con toda la furia que tenía.

-¿Y tú qué? ¿Eres lo mejor por estar buscando sexo en cualquier lugar? ¿No te duele no tener a nadie a quien amar? Sí. Esa es la respuesta. Si te duele. –se zafó del agarre y se alejó un poco del cuerpo del otro, pero viéndolo totalmente decidido. –Al menos yo tengo a Yoochun. Tú en mi vida fuiste nada más que un error. Uno que nunca más volveré a cometer.

Changmin lo miro sin reconocerlo. No podía creer que frente a él tenía a Junsu. Al inocente e ingenuo de Junsu.

“¿No te llamaría la atención tener algo de solo una noche?”

“¿Algo como qué?”

“Sexo.”

Junsu tenía más que claro que nunca volvería a cometer una locura como esa. Ese no era él. Para él, los sentimientos tenían que estar involucrados.

Siempre.

“No lo sé…”

“Será divertido. Nadie tiene que saberlo.”

“Pero…”

“No puedes opinar sobre ello sino lo pruebas primero.”

Junsu comenzó a caminar muy lejos de allí. Luego llamaría a Yoochun para decirle que se encontraran en otro lado.

Changmin observó el cuerpo de Junsu marcharse. Muy pensativo. ¿Qué era lo que buscaba para sí?

“No lo sé, Changmin… yo no soy así.”

“¿No eres así? ¿Y cómo eres? ¿Un chico virgen buscando amor?”

“No… no es eso, pero…”

“Te repito. Si no sabes no digas. Entonces… ¿aceptas?”

Yoochun entró a la pequeña cafetería que quedaba a unas cuadras del lugar inicial en el que él y Junsu se encontrarían. Visualizó a Junsu en una de las mesas del lugar y se acercó a ella.

-Junsu… -lo llamó tranquilamente. Junsu se veía muy angustiado.

-Te juro que nunca he dejado de amarte. Yoochun, lo siento. –Yoochun se sentó frente a él, sin comprender mucho lo que decía.

-¿De qué hablas?

“Está bien.”

“¿De verdad?”

“Tendremos sexo. Tú y yo.”

-Yo… sé que acepté pero… -Yoochun se levantó de su asiento y se colocó a un lado de Junsu.

-Ven, vamos. –lo levantó lentamente y se marcharon del lugar.

Junsu se puso un tanto nervioso ya que Yoochun no dijo nada durante el camino. Se dirigían a la casa del mayor.

-Yoochun… -habló débilmente. Yoochun lo sentó en el sofá cuando entraron a la casa. Yoochun se arrodilló frente a Junsu.

-Detesto cada vez que pides disculpas. Detesto cada vez que me pides perdón. Pero más que todo. Detesto que te sientas culpable de todo lo que pasó. –Yoochun tomó el rostro de Junsu, haciendo que se vieran por algunos segundos. –Yo tampoco he sido la mejor persona. Y el que no haya estado con alguien más, no significa que esté limpio de toda culpa.

Junsu tragó despacio su saliva. Se sentía nervioso de pronto, pero no de miedo. Sentía como si algo emocionante sucedería en ese momento. El rostro de Yoochun se lo decía.

Se sentía como cuando fue su primera vez con Yoochun.

-Quiero, que después de hoy, olvides todo lo malo que piensas que hiciste. Quiero que hagas como si nunca hubiera pasado. Como si Changmin nunca hubiera llegado a tu vida. –Yoochun se acercó lentamente al rostro de Junsu, y lo besó.

Con demasiada ternura, con mucha paciencia. Como si el tiempo se hubiera detenido solo para ellos. Para que pudieran darse el beso más hermoso del mundo.

Yoochun se fue levantando poco a poco, hasta tener el cuerpo de Junsu totalmente recostado sobre el sofá, y su cuerpo sobre el de él.

Junsu rodeó el cuello de Yoochun con sus brazos, acercándolo más a su cuerpo, disfrutando más del contacto entre ambos.

-Chunnie… -se sonrojó al volver a decir aquel diminutivo que tiempo atrás le había colocado.

-Dilo… dilo de nuevo. –susurró en su oído para comenzar a bajar al cuello del otro y besarlo.

-Chunnie… Chunnie… ah ~ -siguió soltando pequeños gemidos cuando Yoochun succionaba o mordía un poco su piel.

Poco a poco sus ropas fueron desapareciendo de su cuerpo. Iban lento, sin prisas. A su ritmo. Y Junsu se sentía bien. Muy bien.

No había ningún sentimiento de culpabilidad. Su mente, alma y corazón se sentían muy bien. Ambos estaban haciendo el amor.

[Junsu]

Yoochun bajaba lentamente hacia mi miembro, acariciando gran parte de mi cuerpo. Su tacto me gustaba demasiado. Lo amaba.

Sentir la respiración de Yoochun sobre mi piel, sus manos recorriendo mi cuerpo. Sus besos, sus abrazos. Cada vez que entraba en mí. Todo eso, lo amaba.

Amaba todo eso, porque lo amo a él.

Entrelacé nuestras manos cuando volvió a penetrarme. Cerré más fuerte mis ojos, quería sentir más todo lo que pasara en ese momento. Una y otra y otra vez. Todo me encantaba.

Nada me parecía que estuviera mal.

Y me di cuenta de que con él no podía sentirme así, culpable. Por nada. Que lo que él y yo teníamos, no era sexo. Que tanto él como yo, hacíamos el amor.


Que Yoochun y yo, siempre haríamos el amor.

5 comentarios:

  1. OMG~ DIOS MIO~ Perdona que comente hasta ahora, depresiones y cero internet xD

    Bueno~ Por alguna razón lo leí como una especie de contraparte de Mi amor a Otro~ Aunque obvio la tematica no es la misma y así~ Y bueno lo amé mucho muschisimo *O* PORQUE EL AMOR DEL YOOSU ES BESHO Y PUEDE CONTRA TODO /o/ #ShipperTime xD

    Y Min me dio un poco de pena~ ¿POR QUÉ MIN TIENE QUE SUFRIR? ;;;; Bueno no creo que sufriera del todo pero me dieron ganas inmensas de patearlo ;;;;

    Gracias~ Lo ame~ PORQUE EL FINAL ES DE THE BEST COUPLE~ XDDD Ok no pero si lo ame~ ES EL PRIMER YOOSU CON FINAL FELIZ QUE HACES XDDD Grashias~ —runea a leer— ♥♥♥~

    ResponderBorrar
  2. Primero.. AMO EL YOOSU~~ :3 (tenia q hacerlo xD)

    ok JunSu eres un calenton =@ nunca me ha gustado el MinSu asi sea de rato u.u (si una mala experiencia)

    Dios me enamore mas de YooChun tan hermoso.. fiel.. comprensivo.. Dios mio ese hombre es perfecto y todavía me preguntan xq es mi Bias ~~

    Yo confieso que quería matar a JunSu por andar de calenton probando con otros siéndole infiel al cachetes de ardilla.. ashhh odio cuando le hacen eso a mi bebe cara de globo.. u.u

    Pero gracias a Dios todo termino bien... nalgas sueltas aprendió la lección y ahora espero no ande buscando lo que no se le ha perdido... y ahora valore y siga amando a mi YooChun Alejandro precioso´~~ ♥

    ResponderBorrar
  3. kyaaa!... Por que demonios no habia leido esto??? -se gopea mentalmente- estan besho este oneshot, disculpa que comente asta ahora pero por andar de curiosa en twitter fue que encontre tu blog ^^ lo se algo tarde :(
    Pero en fin... ame tanto la forma de ser de Yoochun el tan lindo y al tontete de Junsu venga que lo queria moler por andar de infiel, lo que daria por estar en su lugar y este susu buscando sexo en otro lado, que le costaba esperar a Chunnie?..
    okno ya me emocione, lo bueno fue que al final todo se soluciono y quedaron felices,
    pobre de Changmin :( pero bueno Junsu solo puede ser de Yoochun...

    gracias por tan linda historia! :) ^_^

    ResponderBorrar
  4. Muy bueno , excelente es el primer fic que leo de la pagina ,seguiré leyendo si este estuvo genial ya me imagino como estarán los demás .Gracias por compartirnos tus historias

    ResponderBorrar

¡Gracias por dejar tu comentario!