*Lo que está en cursiva, es el pasado, cuando todos estaban más jóvenes.
Capítulo 1
-¿Qué es lo que
tienes ahí? –Junsu luchaba con Changmin para que le mostrara la hoja que tenía
en sus manos (y que en ese momento la alejaba del otro).
-Ya te dije que
nada. No seas molesto y deja de intentar verla. –Junsu lo vio molesto con un
puchero y dejó de intentar.
-Siempre eres cruel
conmigo. Apuesto a que ya le has enseñado eso a alguien más… -se cruzó de
brazos y le dio la espalda.
-No se lo he
enseñado a nadie. No seas infantil, Junsu… -comenzó a meter todo a su mochila.
–Vámonos, tenemos clases aún. –empezó a caminar.
-¡Espérame! –Junsu,
apurado, tomó sus cosas y corrió hacia él.
Junsu y Changmin se
encontraban cursando su último año de secundaria. Y al terminarla, seguirían
(juntos también) en una escuela de música. A Junsu le apasionaba demasiado el
canto, y en varias ocasiones le había comentado a Changmin su deseo por
participar en musicales. Changmin, en cambio, pensaba seguir alguna carrera que
le proveyera trabajo, y gracias a Junsu, pudo ver los dotes que tenía para el
canto, que si los pulía, podría tener una de las mejores voces en el país, así
como la de Junsu.
Las clases
transcurrían aburridas (según Junsu), Changmin sólo prestaba atención, o lo que
podía, ya que Junsu siguió pidiéndole que le mostrara lo que estaba haciendo
minutos atrás.
Junsu veía con ojos
suplicantes a Changmin. Y éste se encontraba más concentrado en la comida que
su alrededor.
-¡Hey, chicos! ¿Qué
pasa? –Jaejoong llegó al lado de Yunho, y los dos se sentaron con ellos.
-Changmin está
siendo malo conmigo –respondió infantilmente Junsu, mientras les daba una
mirada de niño herido a los mayores.
-¿Qué te hizo esta
vez? –preguntó entre sonrisas Yunho. Él sabía muy bien como eran “las peleas”
entre esos dos.
-¡No quiere
mostrarme algo! –chilló y Changmin colocaba sus cubiertos sobre la mesa.
-Ah~ hola, Yunho
hyung… Jaejoong hyung –dijo, ignorando el berrinche que Junsu tenía.
-¡Changmin! –Junsu
gritó y de no ser por Jaejoong y Yunho, el otro le hubiera dado un fuerte golpe
para que así tuviera un motivo para gritar su nombre con tanta desesperación.
-Ya, los dos, tranquilícense,
por favor. –pidió Jaejoong en un tono demandante.
-¿Por qué no pueden
estar un momento en paz? –Yunho sobaba sus cienes, tratando de calmarse. Esos
dos siempre lo sacaban de quicio.
-Es él quien nunca
está tranquilo. Si no fuera por él, muchos no sabrían de mi existencia –dijo
cruzándose de brazos y girando su cabeza hacia otro lado.
-Eres malo… muy,
muy malo. –pataleó Junsu. Jaejoong y Yunho se giraron para darles las espaldas
a los menores.
-100 a que terminan
juntos –susurró Jaejoong.
-200 a que se casan
y tienen hijos. –Yunho extendió su mano para cerrar el trato, pero Jaejoong lo
vio extrañado por lo que acabada de decir. -¿Qué?… está claro que terminaran
juntos.
-Bien… en todo
caso. No es necesario hacer esto. –bufó y se incorporaron a la “conversación”
topándose con un Junsu llorando por la atención de Changmin. –O puede que no…
-suspiró. –Bien chicos. Los dejamos, ustedes deben de arreglar sus malos
entendidos.
-No seas muy
cruel con él. Vamos, son amigos,
llévense bien –animó Yunho a Changmin. El otro respondió con un resoplido de
incredulidad.
Los mayores se
fueron, dejando a unos “enojados” amigos.
-Entonces…
-tiernamente, Junsu intento comenzar una charla, normal.
-Tengo clase. Quizá
nos veamos luego. –se levantó y se fue.
-Se aprovecha
porque soy el menor –dijo para sí, con un puchero.
Y sí. Junsu también
se tomaba que Changmin era 10 meses mayor a él, por lo que se comportaba como
un niño a su lado. Y Changmin también lo aprovechaba. Vaya que si sacaba
ventaja a veces con ello.
Junsu rápidamente
se fue a seguir a Changmin, y grande fue su enojo cuando el mayor se dirigió
hacia los jardines de la escuela.
Changmin se sentó
en una de las bancas y saco un cuaderno color negro y comenzó a escribir en él,
así como también tachaba algunas cosas. Junsu sabía que ahí tenía la hoja que
tiempo atrás no quiso darle.
Changmin se puso de
pie y comenzó a irse.
-Ya puedes salir de
tu escondite. Ya has escuchado demasiado. –dijo fríamente, al girar un poco su
cabeza y así Junsu supiera que hablaba con él.
-¿Cómo… cómo supiste
que te observaba? –salió de su escondite, teniendo su mano cerca de su boca,
con miedo.
-El pasar
desapercibido no es tu fuerte. –y se fue.
-¡No es como si
hubiera escuchado todo lo que decías! –gritó inútilmente, ya que el otro ya no
se encontraba ahí. –Tonto Changmin. –Junsu se fue furioso a su clase de inglés.
Las clases de ese
día terminaron. Junsu fue a buscar a Changmin a su clase de guitarra. Vio como
todos los alumnos salían, menos Changmin.
-Me gustaría que
recibieras esto –una chica extendía una pequeña carta a Changmin. –Aunque no me
correspondas… mírala por favor. –la chica tomo sus cosas luego de que Changmin
tomara la hoja, y se fue.
-En estos últimos
días has recibido varias cartas. –Junsu se puso a un lado de Changmin, mientras
este último arreglaba sus cosas.
-Tómala si quieres.
A mí no me importa. –le extendió el papel.
-Eres un tonto… al
menos deberías leerla. No seas tan malo. –Junsu, pese a lo que dijo, tomo la
carta y comenzó a verla.
-¿Por qué debería
verla? Tú lo haces en mi lugar. –comenzó a salir del salón, siendo seguido por
Junsu, muy concentrado en la carta.
-Dice que ha estado
en el cuadro de honor dos veces… es la mejor de su clase y va a clases de ballet.
–acomodó la cinta de su mochila en su hombro. –Su familia es muy acomodada
también… ¿Quién pone eso en una carta de amor? –Junsu lo vio extrañado.
-Ella. Queriendo
ser perfecta para mí. –dijo sin importancia. Pasaban por la puerta principal
del instituto.
-Oh~ -asintió para
seguir viendo la carta. –Tampoco tenía mala apariencia. Aun así no te conviene
–le extendió la carta al mayor, para que la guardara.
-La tiraré. –se
acercaron a un bote de basura.
-¡No lo hagas! Es
muy cruel. –lo detuvo cuando estaba a punto de tirarla.
-¿Por qué no? Tú
mismo dijiste que no me conviene. ¿Por qué conservar este papel con miles de
halagos hacia ella misma? –tenía en la mano la carta, como esperando la
autorización de Junsu.
-Haz lo que
quieras. –se fue a paso veloz. Changmin tiro la carta y siguió a Junsu.
-Me gustaría saber que
diría una carta tuya confesando tu amor hacia mí. –susurró en el oído del otro
cuando lo alcanzó. Junsu se detuvo en seco.
-¿Estás loco? –frunció
el ceño. -¿Por qué debería de escribirte una carta de amor?
-No lo sé… amor
oculto debe estar dentro de ti. Estás todo el día conmigo, de un lado a otro
¿Qué puedo pensar? –se puso frente al otro, casi intimidándolo.
-¡Tonto! Somos
amigos, los mejores amigos. ¿Cómo puedes pensar siquiera en eso? –se cruzó de
brazos enfadado.
-Como digas~
-Changmin se alejó de él y siguió caminando hacia su casa. Junsu suspiró.
-Tonto… -bajó la
mirada y comenzó a caminar lentamente hacia su casa, que para mala suerte de
él, quedaba a un lado de la de Changmin.
Junsu se dirigió a
su habitación nada más entro a su casa. Ignoro la petición de su madre para que
le ayudara en algunas cosas, pero su mente estaba más perdida que otros días.
Se acomodó en la
mesa de estudio que tenía en su habitación, miro por un momento hacia la
ventana que tenía frente a la mesa y luego dejo caer su cabeza sobre la mesa.
-Te dañaras más el
cerebro si haces eso. –Changmin dijo desde su ventana, frente a la de Junsu.
-¡Cállate, tonto! –le
gritó y puso sus cortinas para ya no verlo. Changmin rió ante eso y se puso a
hacer sus tareas.
-Junsu, cariño, ven
a ayudar a tu hermano a colocar la mesa. –pidió su madre desde la puerta.
-Ya voy mamá.
–pesadamente se levantó y fue a ayudar.
~Something~
-Junsu, ya es hora del show. –un señor de una edad
avanzada le informaba a Junsu desde el marco de la puerta del camerino de este.
-En dos minutos salgo. –respondió Junsu, para que luego
la chica que lo estaba maquillando, terminara.
Junsu se levantó de su silla, agradeció a la chica y se
dirigió hacia el escenario. Junsu desde hace cuatro años que es actor de
musicales. Gracias a su hermosa voz, ha logrado un gran lugar en la industria
de los musicales, pese a aún ser un novato para la mayoría.
Junsu se encontraba vocalizando para poder salir al
escenario. Cuando el telón se abrió, varios de los demás actores salieron a
escena, dejando a Junsu de último.
-Nuestro Minkyung no lo permitirá –dijo una chica del
reparto, dando paso a la escena donde Junsu salía.
-Deberían de irse de una buena vez, su lugar no es aquí.
–dijo Junsu, recitando todo lo del guión.
-No eres nadie para ordenarnos eso. –otro chico del
reparto se colocó más cerca de él.
-Yo soy el hombre de Iseul. Por lo tanto, tengo todo el
derecho de pedirles que se marchen –se colocó delante de la chica, quien se acercó
más a él y con sus dos manos tomó su brazo.
Los hombres se giraron a ver confundidos y se fueron de
escena.
-Minkyung… -dijo levemente, pero audible para la
audiencia. Junsu se giró para verla y tomarla del rostro.
-Nunca más te vuelvas a ir de mi lado ¿Bien? –y la
abrazo. Para dar paso, a la primera canción de esa presentación.
-Te he encontrado… -susurró para sí un chico de la
audiencia.
Al terminar la presentación, los calurosos aplausos no se
hicieron esperar, despidiendo así a todos los actores, pero en especial a
Junsu.
Cuando todos los actores ya se encontraban en el salón
principal, se dieron un enorme aplauso, para así dar inicio a la celebración
por ser la última presentación de ese musical.
-Queremos dar un enorme agradecimiento a Junsu, por dar
todo en cada presentación. –habló el actor mayor de todos.
-No es nada, sunbaenim –un tanto sonrojado dijo Junsu.
-¡Vamos! Levántate y dinos algunas palabras. –le pidió,
mientras lo levantaba también.
-Yo… me alegro de poder terminar este proyecto, junto con
mis cuatro años de ser ya un actor de musical. Gracias a todos por guiarme
siempre –dio una leve reverencia y todos aplaudieron en respuesta.
Todos comenzaron a comer lo que había delante de ellos, y
entre charla y bromas, los chismes no se hicieron falta.
-¿Escuchaste que Max empezará a realizar musicales? –una
chica al lado de Junsu le comento a su amiga.
-Si… eso he visto. Siendo sincera, su voz es buena. Pero
no genial. Y menos si hablamos de su actuación. No le irá muy bien. –comentó la
otra, para luego dar un mordisco a lo que sus palillos tenían.
-Tienes razón… aun así, vendería mucho. Tiene gran
reconocimiento ya. –volvió a hablar la otra.
-Aun así, si viniera a tocar puertas aquí, yo le haría
ver que no tiene lo necesario para creerse un actor de musicales. –encaró. Junsu bajó levemente su cabeza, mientras
seguía comiendo.
De pronto, se escuchó como el director de aquel musical,
hablaba amigablemente desde atrás de la puerta de aquel salón.
-Chicos, necesito su atención por favor. –pidió el hombre
mayor cuando entró. Todos lo miraron, menos Junsu, que se encontraba en su
propio mundo. –Déjenme presentarles a una gran persona. Que desde ahora, será
parte de un nuevo proyecto, y… compañero de ustedes.
Todos se giraron para murmurar un sinfín de cosas. El
director hizo una seña con su mano hacia la puerta, y de pronto, un hombre más
alto que él se dejó ver.
-Hola a todos, soy Max. Espero puedan guiarme bien desde
ahora en adelante –se presentó y dio una leve reverencia. Cuando levantó su mirada,
se encontró con Junsu, que lo miraba perplejo, o casi asustado.
Al terminar la reunión, todos se dirigieron a sus casas.
Junsu pasó a su camerino, pues aún tenía cosas que arreglar sobre su vestuario.
Al salir del lugar se topó con el chico que había llegado de último a la cena
de ese día.
-Buenas noches. –dijo levemente, para irse al lado
contrario de donde este se encontraba.
-Hace tanto que no nos vemos. No has cambiado nada. –lo
siguió, mientras metía sus manos entre las bolsas de su enorme abrigo.
-No sé de qué habla. –Junsu apresuró su caminar.
-Junsu. –lo detuvo sosteniéndolo del brazo. -¿No me
recuerdas? –Junsu giró para verlo.
-¿Debería? –hablaba nervioso, tratando de zafarse del
agarre.
-Soy yo, Changmin… ¿Recuerdas? –y Junsu cerró sus ojos,
tratando de ocultar todo lo que sentía al volver a escuchar ese nombre. Pero
especialmente, de volver a tenerlo en frente de él.
Primero que nada AMO ESOS EDITS SHDGSDGASDHASGDHASGDAS♥
ResponderBorrarOMG~ Hay cosas que no comprendo pero supongo que todo se resolverá con el pasar de la historia y eso me agrada~ Me enamore de este fanfic xD Gracias Mary~ ♥♥♥~
Después de su amistad en su época de escuela, ahora Junsu se hace el que no lo conoce... Que habrá pasado entre ellos?, a seguir leyendo, gracias
ResponderBorrarMuerta murida. Cuando le dijo que "¿como sería una carta de el?" creo que ambos están enamorados, pero no se dan cuenta o no quieren aceptarlo... Haya es tan gay, tan meloso, es minsu! Muero. (:
ResponderBorrarOk...eso fue k??? Como que no lo conoce??? No lo recuerda??? Que paso...>.<
ResponderBorrarSe siente intrigada....:3
Omg... Por que esa actitud?!?; sera que detuvieron una pelea fuerte?! Asdasd
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