Mi último adiós - YunJae

Título: Mi último adiós.

Autor: Marysabel/IsabELF/Iza

Pareja(s): YunJae

Extensión: Oneshot

Género: Drama, angst.

Advertencias: Muerte de un personaje

Sinopsis:  Por que necesitaba decirle adiós al amor de su vida.

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“¿Cómo no pudiste cumplir con tu promesa, Yunho? Me dejaste…solo, yo te amaba…te amo, y te amaré…vuelve…”

Jaejoong se encontraba tirado en la cama que compartía con Yunho, rodeado de muchas fotografías que marcaron muchos momentos hermosos de ellos dos.

-¡Yunho! –reclamó Jaejoong cuando su novio le había quitado un gorro de color negro.

-¿Pero qué pasa? ¿Qué quieres ocultar con este gorro? –dijo muy sonriente y animado mostrando dicho objeto.

-Es… ¿no lo notas? –no quería decir lo que lo molestaba.

-Dime –ahí iba su sonrisa que te hacia temblar, principalmente a Jaejoong.

-Mi cabello… -dijo cabizbajo mientras se tocaba las puntas de su cabello.

-Uhm… -lo observo un momento –Simplemente no te gusto como te lo cortaron ¿cierto?

-Si… ¡pero es que yo pedí de una forma y me lo hicieron de otra! –dijo ya molesto.

-Tranquilo, mañana iremos a que te lo arreglen ¿Está bien? –lo abrazó dulcemente.

-Yunho…

-Dime –cerró los ojos aspirando el aroma de su novio.

-¿No te parece horrible? –levantó un poco la vista.

-¿A qué te refieres? –su mirada detonaba la total confusión que tenía.

-Mi cabello, ¿No te parece que esta desastroso? Quiero decir… no ayuda con la imagen que tengo –y volvió a agachar su cabeza.

-Tú no eres feo, Jaejoongie –le tomo del mentón y le deposito un suave y tierno beso en los labios.

-Yo…

-No digas más, para mí siempre serás hermoso –y le dio otro beso.

Jaejoong siempre había tenido el complejo de que era una persona fea, Yunho y demás amigos le decían que no era así, él insistía pues, su apariencia frágil y casi de chica no le ayudaba mucho, no le agradaba que lo confundieran con una chica.

Jaejoong decidió levantarse de la cama y escoger algo de ropa para salir, y despejarse del dolor que sentía.

Iba caminando casi sin rumbo.

Hasta que llegó a un mirador, era totalmente hermoso.

El lugar donde vivía no tenía mucho paisaje, sin embargo, por alguna razón, se podía apreciar una bella vista.

Jaejoong divisó un pequeño arrollo (para su sorpresa) en ese lugar. Decidió ir hacia él.

Se quitó sus zapatos y metió sus pies al agua, se sintió relajado por un momento.

Enrollo su pantalón para que no se mojara y así hundir más sus pies. Se sentó sobre una piedra que tenía cerca.

El aire toco su rostro, lo inhalo, desde hace mucho no se sentía así de tranquilo.

Decidió irse ya de ahí.

Se levantó y se secó un poco.

Cuando comenzó a irse pudo ver a una señora con una venta de flores.

Y ahí se encontraba Jaejoong, frente a lo que más dolor le hacía.

La tumba de Jung Yunho.

Su novio.

Hace poco más de un mes que Yunho había muerto en un terrible accidente.

Yunho se dirigía para el hogar que compartáa con Jaejoong, ese día, en especial, estuvo muy cargado de trabajo, y sin duda su sueño era enorme.

Lo único que pasaba por su mente era llegar a casa, cenar algo extremadamente delicioso, preparado por su novio, y dormir, hasta el siguiente día.

Cosa que, lamentablemente, sucedió.

En algún momento de la trayectoria, los ojos de Yunho comenzaron a cerrarse, por el sueño, y fue cuando se desvió un poco y dio contra un camión.

A los primeros que avisaron sobre eso fueron a los padres de Yunho. Y ellos le avisaron a Jaejoong.

Ninguno de los presentes en el hospital creía lo que había pasado.

Pero Jaejoong, en especial, no lo demostraba. Nunca demostraba debilidad ante nadie, a excepción de Yunho.

Sin embargo, se sentía morir.

En ese momento, Yunho se encontraba en la sala de operaciones, para ver si podían salvarlo.

Pero fue inútil.

Cuando le dieron la noticia a sus padres y a Jaejoong, éste último salió corriendo de aquel hospital, ignorando los llamados hacia él.

Los padres de Yunho, los suyos y sus amigos lo llamaban, tanto a su celular como a su casa.

Pero no respondía. Simplemente lloraba.

En la oscuridad del cuarto que compartía con Yunho.

Y así paso, por mucho tiempo.

Pero ahora ahí se encontraba, de pie.

Dando una sonrisa melancólica mientras veía la inscripción en la lápida.

Jun Yunho

1986-2013

“No importa donde, seré la estrella que más brille. Para ti. Por ti.”

Jaejoong pasó su mano.

Pequeñas lágrimas recorrían su rostro.

Y decidió dejar sus flores sobre la lápida.

Y rompió en llanto, sabía que con eso no lo regresaría, pero, era la primera vez que se encontraba ahí.

Luego de mucho tiempo.

Se sintió bien luego de llorar, como si alguien estuviera a su lado, reconfortándolo.

Despidiéndose, a la vez.

Cuando creyó ya haber sacado todo su dolor, decidió marcharse.

Luego de haber dado unos cuantos pasos topo con una persona.

-Oh, lo siento –dijo la señora, Jaejoong levanto la vista y supo de quien trataba.

-Madre –dijo casi sin aliento.

-Oh Jaejoong, estas…aquí –le dio una sonrisa cálida.

-¿Tú que…haces aquí? –pregunto, pero al ver a la madre de Yunho lo supo.

-Jaejoong –dijo levemente la madre de Yunho.

-Señora Jung –dio una leve reverencia.

-Me alegra verte aquí. –le dio una sonrisa tímida y un tanto fingida, por el dolor.

-No sonría si no quiere, la entiendo completamente –le tranquilizo Jaejoong.

-En parte, si quiero sonreír, el verte aquí es…

-Sorprendente –finalizó su madre.

-Lo se…lamento mi actitud un tanto infantil –dio otra reverencia.

-No debes disculparte, yo también quise hacer lo mismo…-se acercó a la lápida y observo las flores. –Las trajiste tú ¿no? –dijo viéndolo.

-Así es, no podría venir con las manos vacías.

-Gracias –dijo dificultosamente, pues las lágrimas comenzaban a fluir.

Jaejoong se le acercó y la abrazó.

Lloraron en silencio por un momento.

Hasta que, para los ojos de Jaejoong, Yunho se hizo presente.

Se sorprendió, pero luego pensó que era un regalo divino.

Yunho le sonreía como siempre, dándole fuerza y ánimo para seguir. Pero sus lágrimas cada vez fluían más.

Yunho se acercó a ellos dos y los abrazo también.

Jaejoong cerro sus ojos, para sentir más el abrazo. Pero al abrirlos nuevamente, Yunho ya no estaba. Vio hacia el cielo y susurró un “Gracias”.

De alguna forma, esa fue la despedida de Yunho hacia Jaejoong.

De alguna forma, todo iría bien para Jaejoong, aunque Yunho no estuviera con él. Físicamente.

“Pero aun si esto es solo un recuerdo, tengo que darte mi último adiós.”